El Grupo Municipal Socialista reclama el soterramiento de las líneas de alta tensión

El Partido Popular de Boadilla del Monte prometió hace ya muchos años que soterraría todas las líneas de alta tensión del municipio. Incluso en 2006 se publicitaba en la página web del Ayuntamiento que se había llegado a un acuerdo con la empresa Red Eléctrica Española, propietaria de las líneas que cruzan algunas zonas de la localidad, para estudiar el futuro soterramiento de éstas.

El Partido Popular de Boadilla del Monte prometió hace ya muchos años que soterraría todas las líneas de alta tensión del municipio. Incluso en 2006 se publicitaba en la página web del Ayuntamiento que se había llegado a un acuerdo con la empresa Red Eléctrica Española, propietaria de las líneas que cruzan algunas zonas de la localidad, para estudiar el futuro soterramiento de éstas. En el año 2005 todos los grupos políticos con representación votaron a favor de una moción para que esta línea fuese soterrada. Han pasado más de 6 años y todavía quedan líneas que sobrevuelan las zonas residenciales de nuestro municipio.

En concreto hay una que preocupa especialmente a los vecinos de la zona. Sobrevuela el parque infantil Antonio Herrero en el Olivar de Mirabal y pasa a una distancia muy pequeña de viviendas y un centro escolar con más de 1500 alumnos.

Municipios cercanos al nuestro como Majadahonda, Pozuelo o Alcorcón llegaron a acuerdos con las compañías eléctricas para ejecutar el soterramiento de las líneas a su paso por dichos municipios.

Si bien las investigaciones científicas no proporcionan evidencias claras de que la exposición a campos electromagnéticos generados por las líneas eléctricas sea la causa directa de ciertas patologías cancerígenas, diversos organismos internacionales recomiendan que como prevención debe existir una distancia prudente entre los campos electromagnéticos y las zonas en las que las personas pasan un período de tiempo significativo, declara Pablo Nieto, portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Boadilla del Monte.

Ante la lógica preocupación de las personas que residen en las inmediaciones de estas líneas de alta tensión, los poderes públicos debemos actuar con cautela y prudencia, y apostar por el principio de precaución cuando existen dudas razonables de que puedan afectar a la salud. Por ello vemos necesario que se inicien los trámites para conseguir que esta línea de alta tensión vaya debidamente soterrada a su paso por esa zona residencial, concluye Pablo Nieto.