Summercase tampoco se celebrará en 2010

El festival de música independiente que escogió Boadilla del Monte como sede de sus tres ediciones, se verá suspendido nuevamente en 2010. La noticia, ha sido acogida con decepción para unos, sus seguidores, y alivio para otros, los vecinos, que veían perturbado su descanso. POLÉMICA ADJUDICACIÓN: Ahora la oposición denuncia que aún no tienen constancia de que los organizadores hayan abonado las tasas municipales, que en sus tres ediciones (2006, 2007 y 2008) ascenderían a 1,1 millones de euros.

El festival de música independiente que escogió Boadilla del Monte como sede de sus tres ediciones, se verá suspendido nuevamente en 2010. El festival no se celebró en 2009, según sus organizadores por "encontrarnos en un contexto económico generalizado que no garantiza la celebración del evento con la calidad que desearíamos". En aquel momento prometieron "trabajar duro" para sacar adelante la edición 2010.

Ahora sabemos que Summercase tampoco se llevará a cabo, ni en Madrid ni en Barcelona, y otros festivales de la casa también han sido suspendidos. La noticia, ha sido acogida con decepción para unos, sus seguidores (el festival llegó a reunir a 150.000 visitantes en sus tres ediciones) y alivio para otros, los vecinos, que veían perturbado su descanso: "Espero que se clausure para siempre. Ese "evento" no ha dado nada positivo a Boadilla. Sólo ruido insoportable", comenta un vecino de Viñas Viejas.

POLÉMICA ADJUDICACIÓN
La celebración del festival en Boadilla siempre fue polémica, no sólo por su ubicación en una zona residencial, sino por las condiciones en las que el Ayuntamiento había realizado la cesión del terreno. Ya en 2006, antes de la celebración de la primera edición, la oposición denunciaba que no se le habían presentado documentos que demostrasen que la organización había hecho efectivo el pago de las tasas municipales para usar terreno público. En total, unos 400.000 €, por instalar el festival en 70.000 m2, en la zona de Viñas Viejas.

Ahora la oposición denuncia que aún no tienen constancia de que los organizadores hayan abonado las tasas, que en sus tres ediciones (2006, 2007 y 2008) ascenderían a 1,1 millones de euros. Aunque el Ayuntamiento rescindió el convenio, la oposición ha anunciado que lo llevará al Tribunal de Cuentas.